La batalla continúa. Ahora, el campo de enfrentamiento de la interna justicialista pasa por las redes sociales. En la tarde de ayer, los principales referentes de “Tucumán por Todos”, la lista que conduce el vicegobernador Osvaldo Jaldo viralizó en los estados de WhatsApp y en Twitter un flyer con la leyenda “Frenemos a Manzur”. Fue antes del acto político que el presidente de la Legislatura encabezó en Ranchillos. La respuesta no tardó en llegar. Desde la lista de Lealtad Peronista, sus dirigentes respondieron de la misma manera y por los mismos canales. La batería de folletos tienen los siguientes mensajes: “La renovación histórica de cloacas en la Capital ¡No se frenan!” “La vuelta a clases presenciales de nuestros hijos e hijas ¡No se frenan!” “Las 3.600 nuevas viviendas para Tucumán ¡No se frenan!” “Las vacunas para todas y todos, las tucumanas y tucumanos ¡No se frenan!” Las obras de cloacas para La Banda y Alderetes ¡No se frenan!” “Las obras para las 93 comunas del interior ¡No se frenan!”

Jaldo le puso contenido a su mensaje en las redes sociales. Además de aludir a un freno a la reforma constitucional con reelección, el vicegobernador despotricó “contra aquellos que usan al peronismo y al interior”. “Aquellos que hoy nos separan llegaron con las urnas del interior, con la del Este tucumano y, cuando lo hicieron, terminan poniendo ministros de la capital”, arengó el titular de la Cámara.

Jaldo continuó con su diferenciación hacia la Casa de Gobierno. “El 12 de septiembre (fecha de las PASO), empieza una nueva etapa en nuestra querida provincia. No hay duda que nadie nos va a frenar”, remarcó, pidiendo el voto para “Tucumán por Todos” a los vecinos de Ranchillos. “Se acabó el tiempo de la moneda para comprar un voto, de intentar comprar con una limosna la voluntad del pueblo tucumano”, continuó.

La campaña ha postergado los viajes de fin de semana de Jaldo a su tierra, Trancas. Hoy irá a Las Talitas y mañana habrá un encuentro con sus dirigentes para delinear cómo continuará la acción política de “Todos por Tucumán”, que aspira a obtener cerca de 180.000 votos en las internas de septiembre.

Reuniones

La confianza de Juan Manzur va creciendo. El gobernador sigue aferrado a las encuestas que le acercó el sociólogo Hugo Haime. No le importa que su imagen haya caído un punto porcentual, según sostienen sus colaboradores. Pone en valor que la ministra de Salud y cabeza de lista de precandidatos a diputados por Lealtad Peronista, Rossana Chahla, ha crecido tres puntos porcentuales en la consideración pública. “Hay que contestar con obras y con gestión”, señala el mandatario a los integrantes de su lista cuando le consultan cuál será la estrategia preelectoral con vista a las PASO. De allí los flyers. “Evitemos los agravios; es lo que nos marcará la diferencia”, insiste.

“El peronismo es un movimiento que requiere de todos y todas. Cuando un compañero pone sus ambiciones personales por encima de la responsabilidad institucional que detenta nos encontramos con un conflicto de base ideológica y concepción de lo que representa nuestro movimiento”, tuiteó el diputado Mario Leito, en alusión a la postura asumida por el vicegobernador.

Manzur está convencido que las internas dejarán en claro que él es el conductor del Partido Justicialista, distrito Tucumán y que, a partir de esa posición, convocará a trabajar a todos los peronistas para las elecciones del domingo 14 de noviembre.

De un lado y del otro del oficialismo tienen en claro que el día después de las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias será difícil, pero habrá que encolumnarse tras los candidatos porque la siguiente batalla es más importante para la gobernabilidad del distrito y del país. El presidente Alberto Fernández y su vicepresidenta, Cristina Fernández de Kirchner, tienen en claro que en Tucumán gana el Frente de Todos. No hay otro resultado posible para la Casa Rosada y para el Instituto Patria. Pese a la grieta en el peronismo, hay contactos entre los referentes de Lealtad Peronista y de Todos por Tucumán y no necesariamente para la cooptación de voluntades, sino para tender puentes hacia los comicios de medio turno.

De todas maneras, los allegados al gobernador no cerraron el libro de pases. “Es cuestión de tiempo. Aquí deben entender que todos hemos apostado a la conducción de Manzur y nadie puede sacar los pies del plato”, insisten los manzuristas. Uno de ellos, con cierta ironía, señala que “parece que “Jaldo pisó un cable de alta tensión y no se dio cuenta porque está en pleno sacudón”, en alusión al alejamiento del bloque Peronismo Verdadero de Armando “Cacho” Cortalezzi (ver página 6). En el manzurismo creen que seguirán sumando dirigentes. Y dicen que es cuestión de días.